El 2 de noviembre de 1986 llegaron a Quito, capital de Ecuador, las hermanas Mª del Pilar Trujillo, Mª Amelia Carneado, Mª Concepción Olvera y Mª Antonia del Sagrario Acosta para la fundación de un nuevo Nazaret. Algunos años después comenzó una nueva e importante etapa: la construcción de la casa actual. Se dio inicio a las obras con la celebración de la Eucaristía y bendición de la primera piedra, el 28 de marzo de 1989. Estuvieron presentes el Sr. Arzobispo, Mons. Antonio González Zumarra, Mons. Francisco Yáñez, el Padre Federico Gallardo, nuestra Madre General (Mª del Pilar López Negrete), la hna. Mª Elisa Latorre y algunas Marías de Guayaquil, Ibarra y Quito, además de las hermanas de la comunidad.

 

Una anécdota —que nos recuerda a los relatos de san Manuel durante la construcción del Seminario de Málaga— es que cuando se acercaba el fin de mes y había que pagar a los trabajadores no se contaba con el dinero necesario, pero gracias a la Divina Providencia comenzaban a llegar donativos de distintos bienhechores, y así se pudo terminar de construir la casa. Finalmente, en 1992 la comunidad se trasladó al nuevo Nazaret, y después de la primera Misa en la nueva capilla, se quedó el Amo en el Sagrario.

Siguieron años de intenso apostolado, y fueron llegando a Nazaret jóvenes con inquietud vocacional, atraídas por el carisma eucarístico reparador. Esto hizo que se diera inicio a la Casa de formación. El 13 de septiembre del año 2003 se celebró con gran alegría la profesión perpetua de la primera hermana ecuatoriana, María del Rocío Peñafiel. Presidió la celebración el sacerdote Emmanuel Beczenac, que la conocía desde pequeña, y concelebró el Padre Javier Iñiguez. También asistieron sus familiares, amigos y miembros de la JER y la UNER.

Casa de acogida de Encuentros latinoamericanos
En 1992 el Nazaret de Quito acogió el I Encuentro latinoamericano de nuestra Congregación, al que también asistieron desde España la Madre General Mª del Pilar López Negrete y la Vicaria, Hna. Mª Delfina. Luego de la Misa presidida por el arzobispo de Quito, Mons. Antonio González Zumarra, la Sra. Pilar de Tobar, Presidenta de la UNER, invitó a todas las hermanas a un paseo y almuerzo de fraternidad. En la clausura del encuentro también participaron los miembros de la F.E.R. y los familiares de las hermanas ecuatorianas.

En enero del año 2004 se celebró el II Encuentro de Latinoamérica, con la presencia de la Madre General Mª Dolores Adán, acompañada por la Vicaria, Hna. Mª Áurea Arévalo. El lema de este segundo encuentro, vivido en un alegre ambiente familiar nazareno, fue «Con la confianza puesta en ti». El encuentro finalizó con la Eucaristía, presidida por Mons. Rafael Yáñez.

Y llegamos al III Encuentro de Latinoamérica, en el año 2009, con participación de hermanas de América, de la Madre General Mª Leonor Mediavilla y la Vicaria en ese momento, Hna. Mª Teresa Castelló. Fueron días de gracia para compartir charlas, momentos de reflexión, trabajos en grupo y por comunidades, celebraciones litúrgicas, Eucaristías, momentos de oración y paseos (a las cascadas de Peguche y al centro de Otavalo).
Otro acontecimiento muy especial fue en el año 2015 pues coincidió la visita canónica de la Madre General Mª Leonor Mediavilla con la preparación de la visita del papa Francisco a Ecuador, del 5 al 8 de julio de 2015. Las hermanas y postulantes pudieron participar en la organización de la estancia del papa en Quito, por medio de la Conferencia ecuatoriana de religiosos, y también se colaboró en la distribución de la Eucaristía. Aquellos días fueron de una alegría desbordante, una experiencia única.

Nuestros apostolados
Desde los inicios, las hermanas trabajaron en numerosas parroquias de Quito y en algunos colegios (Spellman, Ortega y Gasset, Martín Cereré y Liceo internacional). La casa también ha estado siempre abierta a retiros, grupos parroquiales, convivencias con niños de los colegios, campamentos RIE, encuentros juveniles y vocacionales, reuniones con los miembros de la Familia Eucarística Reparadora y las familias de las hermanas.
Otros apostolados son: preparación a los sacramentos en parroquias y colegios, talleres para padres, encuentros de formación para catequistas, preparación de campamentos en Selva alegre y Tumbaco, marchas por la vida, vigilias, misiones en el oriente, la cuenca y la costa. Además, este Nazaret es Casa de formación de postulantes. El postulantado es la primera etapa en el itinerario formativo de nuestra vida consagrada. Se vive en comunidad y permite discernir la opción de vida a la que Dios nos llama.

¿Sabías que…?

• Este Nazaret de Quito se llama «del Inmaculado Corazón de María». Varios países han sido consagrados por sus respectivos obispos al Inmaculado Corazón de María, y el primero fue Ecuador, en el año 1892. La oración de consagración al Inmaculado Corazón de María de san Luis María Grignion de Montfort dice así: «Todo tuyo soy, y todo lo mío es tuyo. En todo lo mío te acojo. Dame tu corazón, María». San Juan Pablo II tuvo como lema de su pontificado la frase Totus tuus (Todo tuyo), inspirado en esta oración mariana.
• Durante el gran terremoto que sufrió Ecuador el 16 de abril de 2016, las hermanas se encontraban en adoración eucarística durante la noche. Cuando vieron las noticias se dieron cuenta de la magnitud del hecho, la cantidad de fallecidos y casas destrozadas, sobre todo en la costa donde fue el epicentro. Nuestra casa solo sufrió unas grietas de poca importancia. Posteriormente se realizaron talleres para poder ayudar a las personas afectadas y se visitó la isla de Muisne para ayudar con la restauración de viviendas.
• Desde el año 2016 nuestro Nazaret acoge a los niños del sector para prepararlos a los sacramentos de iniciación cristiana. También se realiza la Novena del Niño Jesús con las familias de los recicladores. Son jornadas de mucha alegría, en que se comparte la fe y se reparten regalos: ropa, calzado, juguetes y dulces típicos.