«Para tu gloria, Santísima Trinidad…»
Hoy, 30 de agosto, en el 60º aniversario de aprobación pontificia de nuestra Congregación, nuestra Hna. Mª Rosalinda Ramos Cerón celebró en Huancayo (Perú) sus Bodas de plata de Profesión perpetua. La Eucaristía de acción de gracias fue presidida por el Cardenal Pedro Barreto Jimeno, S.J., arzobispo metropolitano de Huancayo. Nos unimos a su alegría a través de la oración, pero también “virtualmente”, ya que la celebración fue transmitida a través de Facebook, desde el perfil del Seminario San Pío X de Huancayo.
Además, en este día tan especial, en nuestro Nazaret de Madrid renovaron sus votos temporales nuestras hermanas Mª Carolina German y Mª Jennifer Montero. Ambas nacieron en Ecuador, y profesaron el 30 de agosto del año pasado en Villa Nazaret (Málaga). Actualmente están en la casa de Madrid viviendo la etapa de Juniorado. La Eucaristía se celebró en la capilla del Nazaret madrileño, y estuvo presidida por el P. Pablo José Muñiz Zapilain, sacerdote del Sagrado Corazón de Jesús (congregación que se conoce también como Padres Reparadores o Dehonianos).
Damos gracias al Señor que nos sostiene con su fidelidad, a cada paso de nuestro itinerario vocacional. Sí, nuestra vida consagrada es una progresiva configuración con Cristo Eucaristía, esto implica un compromiso de Formación permanente que nos renueva e impulsa para responder con fidelidad a la vocación y a los desafíos de la Iglesia y de la sociedad actual.
En primera persona
«El primer libro que leí de san Manuel me ayudó para que me decida a entrar en Nazaret; fue “Así ama Él”, sobre todo cuando leí el apartado “Estar con Jesús íntimo”, y de manera especial la siguiente frase: “Ya no es un día el que van a estar con Jesús…, sino muchos días y muchas noches… Van a estar con Jesús íntimo, van a comer en su mesa, a dormir bajo el mismo techo…”. Esto fue totalmente decisivo para mi elección, me ayudó a discernir la llamada y me sigue recordando con su más delicada invitación a vivir con Él, por Él y para Él» (Hna. Mª Carolina German, m.e.n.).
«Nazaret está formado por cada una de las Hermanas que, gracias a nuestra entrega, de diferentes maneras y de acuerdo con lo que el Señor nos pide a cada una en un determinado momento y lugar, hacemos posible su construcción. Estamos a punto de celebrar 100 años, eso significa que nuestro carisma y nuestra misión son necesarias para el mundo de hoy, porque todavía hay desconocimiento del mayor Bien del hombre: Jesús Eucaristía. Vivimos en un momento de cambio continuo, y la necesidad sigue siendo la misma: reparar el abandono de Jesús y darlo a conocer, por eso mi deseo en este Año Jubilar es que cada una de las que formamos Nazaret seamos dóciles al Espíritu de Dios para poder acoger con audacia y fidelidad, como María, las inspiraciones necesarias para ser creativas en nuestra misión eucaristizadora. De esa manera seremos fieles al Señor y al sueño de nuestro Padre fundador» (Hna. Mª Jennifer Montero, m.e.n.).