Hna. Mª Mónica (izda.) y Mª Esther en la catedral de Lugo.

El 21 de octubre de 2017, las Hnas. Mª Esther Herrero y Mª Mónica Maldonado dieron inicio a una Misión en la diócesis de Lugo (España). Con ocasión del tercer aniversario de su envío misionero, compartimos algunas pinceladas de esta particular experiencia.

Frutos de la canonización
El obispo de Lugo, Mons. Alfonso Carrasco Rouco, estuvo presente en la canonización de san Manuel González, que tuvo lugar en Roma el 16 de octubre de 2016. Llevaba mucho tiempo esperando que le concedieran la indulgencia plenaria para la Catedral de Lugo, y se la concedieron en esos días. Por otra parte, conocía la Obra de san Manuel, y en la diócesis había algunos grupos de Marías del Sagrario que las hermanas visitaban de forma esporádica. Por eso, pidió a nuestra Superiora general evaluar la posibilidad de una presencia permanente de las hermanas en dicha diócesis.

Así surgió la Misión en Lugo, donde fueron enviadas las Hnas. Mª Esther y Mª Mónica. Las acompañaron desde Madrid las Hnas. Mª Nadine y Mª Paula. Después de instalarse en la casa, otro día de gran alegría para las misioneras fue el 3 de noviembre de 2017, ya que acogieron la presencia viva de Jesús en el Sagrario de este “Nazaret en salida”. Además, la misión fue encomendada a la intercesión de Santa María Misionera y de los Ojos Grandes, Patrona de Lugo.

Eucaristizando en la diócesis
Uno de los principales apostolados que realizan las hermanas es la presencia y acogida en la Catedral de Lugo, donde animan las celebraciones litúrgicas y la adoración del Santísimo durante el día. Allí, en el silencio de la oración y el contacto con la gente, pueden vivir la Eucaristía en plenitud: pasando de las palabras al amor, del silencio a la relación, de la Presencia a la misión.

También colaboran en la Delegación Diocesana de Catequesis, animando las escuelas de catequistas (hay cinco centros en la diócesis) y compartiendo un modo de catequesis vivencial, al estilo de san Manuel. Además, visitan los grupos UNER de Galicia. Y cada uno de esos apostolados son campos propicios para sembrar la Buena Noticia de la Eucaristía con creatividad, ingenio y amor.

¿Sabías que…?

• Lugo es conocida como “la ciudad del Sacramento”, ya que el Santísimo Sacramento está permanentemente expuesto, día y noche, desde tiempo inmemorial, en la Capilla mayor de la Catedral. Actualmente, la custodia con el Santísimo ocupa el lugar central, y podemos encontrar otros muchos elementos históricos que nos hablan de la devoción a Jesús Sacramentado.
• Cada 15 de agosto, el pueblo fiel de Lugo rinde homenaje a su Patrona que llamó, con gran acierto, Nuestra Señora de los Ojos Grandes. Se trata de una imagen que se remonta al siglo XII, donde los grandes ojos de la Virgen están como perdidos en el espacio, mirándolo todo con sus grandes ojos de misericordia maternal.
• Lugo es la diócesis española con mayor número de parroquias: 1139. Su población es eminentemente rural, con alrededor de 300.000 habitantes en un territorio que comprende la mitad sur de la provincia de Lugo, los concellos de Toque, Melide y Santiso, de A Coruña, y los de Agolada, Lalín y Silleda, de Pontevedra.

En primera persona
«Fui descubriendo mi vocación al lado de mi madre, que era María del Sagrario. Sentía que nadie me llenaba plenamente, buscaba alguien que fuera verdadero y auténtico. Conocí a las Misioneras Eucarísticas de Nazaret, me llamó la atención la vivencia de la caridad y el apostolado, aunque también tuve inquietud por la vida contemplativa, y fui discerniendo hasta que me decidí. El aspecto que más me atrae de Nazaret es la forma como se entiende la Eucaristía, como estilo de vida que se puede expresar en la sencillez de lo cotidiano. También me identifico con san Manuel, nuestro fundador, con esa vida tan profunda y sencilla al mismo tiempo, cómo ora, vive, eucaristiza de forma heroica, pero siempre con naturalidad. En este momento estamos dos hermanas en una experiencia misionera en la Diócesis de Lugo. Eucaristizamos en la catedral y en la delegación de catequesis por todos los medios que Dios nos pone al alcance: turistas, adultos, catequistas, niños, jóvenes. Me siento haciendo camino y abriendo espacios, para que algún día haya tres hermanas y pueda nacer un Nazaret entre las montañas de Galicia, desde donde se irradie un gran amor a la Eucaristía» (Mª Esther Herrero Machón, m.e.n., Misión en Lugo, España).